La primera prioridad en la planificación de un sistema de recolección de polvo debe ser determinar la información básica del proyecto, tan completa como sea posible. Esta debe incluir características específicas acerca del polvo que será recolectado, corrientes de aire o gas, así como también los límites aceptables de emisiones, la ubicación y requisitos de la planta. Para después poder realizar una evacuación de la prevención de contaminantes o planes de control.